Gino Severini pintó Bailarina en azul o Bailarina azul en óleo sobre lienzo en 1912. Este cuadro fue creado en París como parte de una serie en la que Severini representaba escenas de cabaret junto con el dinamismo de la danza. El cuadro forma parte de la Colección Peggy Guggenheim de Venecia.
¿Qué se representa en la Bailarina de azul (Blue Dancer)?
El cuadro Bailarina en azul representa la experiencia de la danza. En primer plano aparece la figura de una bailarina con un vestido azul que baila con gracia. La figura de un violinista está representada en la esquina superior derecha de la composición. Los refinados movimientos de baile de la bailarina se representan mediante el método cubista de fragmentación de la escena.
Bailarina en azul (Blue Dancer) – Análisis
En el cuadro Bailarina en azul, Gino Severini da al tema tradicional de la bailarina un carácter futurista. Este cuadro es uno de los muchos de la serie en la que Severini trata el fenómeno de las escenas de baile y cabaret. La composición del cuadro Bailarina en azul está organizada de forma sencilla con la bailarina en la parte central y el violinista en el fondo. Utilizando la perspectiva móvil, Severini permitió la simultaneidad de múltiples planos y puso de relieve el dinamismo del movimiento. La fragmentación cubista permitía la ilusión de continuidad del movimiento. Es importante destacar la importancia del enfoque divisionista que Severini aplicó en este cuadro. Severini situó los tonos cálidos del rojo en la parte central de la composición, es decir, en los brazos y el torso de la bailarina. Esos tonos se correspondían con el traje del violinista de la esquina derecha, así como con el suelo sobre el que está la bailarina en la parte inferior del cuadro. La mayor parte de la composición la ocupa el elegante vestido azul de la bailarina. Severini logró el efecto de refracción de la luz combinando campos blancos, grises y negros que rodean la forma piramidal del cuerpo de la bailarina. Para mejorar la refracción de la luz, Severini también utilizó lentejuelas en la elaboración de este cuadro.
Obras de arte relacionadas
En los cuadros de Gino Severini, el motivo de la bailarina era muy común. Ya sean figuras individuales o representaciones colectivas de bailarines, las escenas de cabaret definieron una parte importante de la obra de Severini. Algunas de las obras relacionadas son el cuadro Dancer at Pigalle de 1912 y el estudio Spanish Dancer de 1913.